Esta semana en Apopa, una familia que bajo amenazas de terroristas, escondían 3 pistolas en su patio, al saber que los criminales ya están en prisión, entregaron las armas a la Policía Nacional Civil.
Al hacerlo de forma voluntaria, no serán procesadas por ningún delito, aseguró el ministro de Justicia y Seguridad Pública, Gustavo Villatoro.
En otro caso en Cojutepeque, un habitante de la zona llamó al 123, para informar que escondía un fusil por amenazas de pandilleros y quería entregarlo.
“Si alguien esconde armas por amenazas de pandillas y las entrega, no tendrá ningún problema legal. Pero si alguien insiste en esconderlas, cuando las encontremos, será enjuiciado por tener armas de forma ilegal y agrupaciones ilícitas”, afirmó.
El Call Center 123, está disponible para recibir información de quienes hayan sido obligados a esconder armas a los terroristas.